Mas y Rajoy, la involución de la política
Es buen momento, ahora que avanzamos hacia las semanas más tranquilas del año –teóricamente–, para inmiscuirnos en disquisiciones filosóficas que triunfan en los bares, pero que tan poco gusta escribir o leer. Señores llega el verano y que menos que buscar las raíces de lo que sucede.