Las redes sociales no sirven para vencer, pero son una herramienta fundamental para ganar confianza en el electorado, y a día de hoy, la gente necesita ante todo confianza. Si algún político ofrece esa confianza el triunfo estará más cercano.
Automáticamente me recordó un artículo que leí hace unos 20 años cuando estudiaba (aprendía la vida mejor dicho) en el University College of London titulado «From fordism to flexibility».